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El conferenciante ,fue presentado como el XX Premio Anagrama de Ensayo
por su obra , ELOGIO Y RE-FUTACIÓN DEL INGENIO , así como
el autor de LA TEORÍA DE LA INTELIGENCIA CREADORA ,la ÉTICA
PARA NÁUFRAGOS y su más reciente trabajo EL LABERINTO SENTIMENTAL
to-das ellas en editorial Anagrama. Autor tardío pero fecundo, que
prepara un diccionario de sentimientos que esta por ver la luz en breve
, según nos ase-guró.
El profesor empezó la conferencia preguntándose:
¿ cómo es posible que el au-mento de la calidad de vida vaya
unido a un aumento de las disfun-ciones afec-tivas ?,y mencionaba como
ejemplo de estos “males afectivos” : las violaciones, el aumento
de las depresiones, el fracasos de la pareja , el que las consultas médicas
sean el 23 % sean por en-fermedades mentales, el que la fluoxetina deje
un beneficio de 1000 millones de dólares .
¿ Qué esta pasando?, ¿cómo es posible
que el hombre ,un ser tan inteli-gente tenga tan poca capacidad para resolver
problemas?. Según su criterio el error viene de antiguo, desde
que los Griegos eligieran como “sujeto inteli-gente” un modelo radicalmente
diferente del que se eligió en la filosofía orien-tal .
En el modelo europeo, inteligencia es igual a razón. Es
decir , ésta no está modelada por los afectos . La
inteligencia occidental es fría , esta cua-lidad le da un ámbito
luminoso , expulsando a los sentimientos de su registro, que serían,
en este modelo, el ámbito oscuro de la inteligencia .
De hecho, en Griego, lo “patológico” es la
ciencia de los sentimien-tos o de las enfermedades. Parece que los males
venían de los sentimientos. Los sentimientos son tenidos como afectos
que nos dominan, no modificables y que enturbian nuestra inteligencia..
Esta concepción es grave, porque no nos juzgamos
a nosotras mis-mos ni a los demás, por lo que sabemos, sino por
lo que sentimos . Tanto es así , que todas nuestras acciones ,están
destinadas a mantener o a cambiar nuestros sentimien-tos. Los sentimientos
son el motor de nuestra vida. Parece que a un lado tenemos la cabeza
y al otro el corazón , sin que podamos fiarnos de él . Partimos
además, de que los sentimientos no son educables y por tanto, no
los educamos . Sin embargo la mayor parte de nuestra vida la dedicamos
a resolver los problemas que nos afectan sentimentalmente.
El profesor MARINA propone una pedagogía
de lo afectivo que vuelva a rein-tegrar, lo que nunca se debía de
haber separado : “integrar los sentimientos y la inteligencia ,para que
ésta, empapada de sentimientos se con-forme y permita dar luz a
nuevos sentimientos .
Toda cultura transmite un determinado modelo sentimental
,luego los senti-mientos son aprendidos. Es decir , existe una autentica
ANTROPO-LOGÍA SENTIMEN-TAL . Marina ,afirma conocer culturas donde
la depresión no existe, y otras culturas en que la ex-presión
de la patología es específica de esa cultura. Comento aquí
como el DSM IV ha tenido que introducir patologías específicas
, según diferencias culturales.
En este momento de la conferencia, se declaró
coleccionista de sen-timientos y nos informó de una cul-tura de
la Melanesia, la “TANGÚ“, en la que no es posible tener rencillas
y que promueven la solidaridad entre sus miembros hasta tal extremo, que
cuando conocieron el fútbol , cambiaron las reglas para que no hubiera
ni vencedores ni vencidos .Así el partido dura, hasta que
se consigue el empate.
Nos comentó igualmente ,que los esquimales
no conocen la ira ,sin embargo los pequeños esquimales sí
que la mani-fiestan en sus rabietas ; luego deben “ aprender a no
manifestarla ”.
Recordó los traba-jos de MARGARET MEAD
en la Micronesia ,en donde pueblos diferentes se-parados tan solo por unos
kilómetros o por un acci-dente geográfico ,determi-nan culturas
diferentes y comportamientos senti-mentales radicalmente diferentes de
por vida . La premisa parece ser ésta : “tras una organización
social diferente , existe por debajo ,una organización afectiva
diferente“. Las diferencias encontradas entre las tri-bus ,ARAPESH ( niños
felices, destete largo, nadie quiere mandar sobre nadie ) con la tribu
MUNDUGUMOR ( en perfecto y contínuo cabreo ), hacen reveladora
esta di-ferencia .
De estos ejemplos, se saca la conclusión de
que el niño, nace inmerso en un uni-verso afectivo y que podemos
diseñar, el tipo de cultura afectiva en el que queremos vivir .
Nuestra cultura occidental europea, parece estar
basada en el sen-timiento de la insatisfacción. El lema que se sigue
parece este : “no hay pro-greso sin insatisfacción , si está
usted satisfecho, es que algo anda mal“. Transmitimos la insatisfacción
valorando lo que no tenemos y lo que perdimos, esto nos lleva a la ansiedad
y al anhelo por lo que no tenemos . Puso aquí un ejemplo,
del ciudadano que suele cambiar de coche con fre-cuencia, en una carrera
por una mejoría de prestaciones en que jamas podrá alcanzar
la meta ,porque no existe, pero en el camino se habrá dejado la
exis-tencia .
Citó un verso del Toledano Garcilaso que
según Marina resume muy bien este estado, “dulce cual fruta del
cercado ajeno“. El verso parece conde-narnos a tomar siempre una fruta
ácida ya que la dulce, siempre será otra, la del vecino.
Estamos inmersos en una cadena de deseos sin fin
, transmitiendo a los niños este sentimiento: “si usted está
contento, es que algo anda mal”. Nos puso aquí el ejemplo ,que empieza
a ser frecuente en determinadas empresas, de que cuando notan que un empleado
esta a gusto y cómodo en un determi-nado puesto, le ofre-cen un
cambio, ya que piensan que cuando alguien no está motivado para
su-perarse, su rendimiento baja . En esta carrera sin fin, nada vale nada
, por tanto no nos puede extrañar la frustración contínua
de la que emana la violencia desmedida , la depresión ,etc.
Como profesor de instituto que da clases a chavales de BUP y
COU y como pe-dagogo se pregunta: ¿ es posible educar los
sentimientos ?. En este sen-tido se manifiesta muy conductual y afirma,
no solo que es posible, sino que ya se está in-tentando partiendo
del siguiente paradigma: “hay que educar los sentimientos para la novedad“.
Ya que estamos en tiempos cambiantes, y na-die puede predecir cuales serán
las necesidades educativas que habrán de venir, es necesario que
los futuros ciu-dadanos sean capaces de adaptarse al cambio de tareas o
estilos con facilidad.
Según Marina , tratar con la novedad es ,
únicamente ,una dificultad afectiva : "o gusta el cambio o no gusta
“ . Nos habló aquí de dos contables expertos ( personas conoci-das
suyas ), a los que su empresa les obliga a llevar la con-tabilidad informatizada
y que fracasaron al adaptarse al cambio,terminando deprimidos y frus-tados.
Esta época parece el fin de la inteligencia
pura, tal y como se valora en los test de inteligencia, para aparecer esa
inteligencia emocional de la que tanto se habla actualmente . El hombre
ha de adaptarse a cambios que pueden gustar o no .Vemos pues , que no es
una cuestión de inteligencia, sino de dis-posición, de estilo,
de manera de afrontar dificultades.....afectivas .
En este sentido y haciendo un guiño a los
numerosos psiquiatras que asistíamos a la conferencia comentó
: Que hacer psicoterapia, no es mas que cambiar el estilo emocional o afectivo
del paciente . Pocas veces se escucha de manera tan con-cisa y acertada
una definición tal .
¿ Y qué son los sentimientos? . Dando
una definición de las de andar por casa, dijo “ es un balance de
como nos van nuestras cosas, en contraste con la vida , es un balance en
el sentido comercial , un resultado muy global del "guiso" que se está
cociendo, como resultado de unos ingredientes que descono-cemos. Lo que
nos llega es un mensaje cifrado , pero ¿ qué ingredientes
tiene esto por debajo ?
Uno sabe lo que siente ,pero no sabe lo que significa
lo que siente. Por ejemplo , los celos ; recordó aquí el
trabajo de CASTILLA DEL PINO y analiza, que los celos no son igual al amor,
ya que generalmente al celoso no le importa para nada la otra persona ,siendo
los celos mas bien una cuestión de posesión e inseguridad,
ya que el único amor que esta en juego es “ el amor propio “. ¿
Qué es lo que produce los celos ?: la envidia . Sin embargo, la
envidia avergüenza mucho, es rarísimo que alguien diga que
es envidioso. La envidia es sentir que existe un obstáculo
a la felicidad personal , que está (ponemos) en manos de otro .
El balance afectivo depende de cuatro sentimientos
básicos,que se-gún Marina y continuando la línea de
la pedagogía sentimental, declara ;que tres de ellos serían
deter-minados por la educación , y el otro sería accesible
a la educación .
El balance afectivo no se puede cambiar sin cambiar
los ingredientes. Lo que sí podemos hacer sin cambiar los ingredientes
es una “ farmacología cosmética “, cambiar la apariencia
del resultado , pero es necesario saber que cuando ter-mina la farmacología
cosmética, termina de hacer su efecto, reaparecerá
de nuevo el balance afectivo primario , sea cual sea éste .
Bien, este “guiso afectivo” depende de cuatro sentimientos básicos
que son: 1- LA SITUACIÓN REAL : Es disparadora de sentimientos .
Hay sentimientos que dependen directamente de la situación real.
Lo que sucede, es que la mayor parte de las veces sufrimos por lo que pensamos
de las cosas, no por los hechos en sí mismos. Apareciendo
aquí, los diferentes estilos interpre-tativos (afectivos )
de la realidad . Esta sentimiento básico es ,“ accesible a la educación
“. Los otros tres son los sistemas de interpretar la realidad .
2- SISTEMAS PERSONALES DE DESEOS Y PROYECTOS : Marina
disertó aquí de la dificultad para educar los deseos, pero
sólo dificultad, no imposibilidad. Igualmente dificultoso, manifestó
, sería educar la actitud de reacción o no reacción,
ante un hecho (actividad-pasividad) y el estado de seguridad o in-seguridad,
ya que estos sentimientos se forjan en la infancia, en épocas remotas,
estando en relación con la figura materna generalmente .
Sin embargo, según su opinión los
deseos se aprenden, y para ejemplificarlo nos recordó la irritación
que en su momento le produjo a EMI-LIO ZOLA, y que dejó manifiesto
en su obra -Para La Felicidad De Las Damas - cuando, dos descu-brimientos
hacen que las mercancías salgan de las cajas de los almacenes para
meterse en los ojos del paseante. Estos fueron el gran alma-cén
(mayorista) y el escaparate , que con su transparencia introducía
necesida-des en los paseantes. Esto le parecía a Zola, una gran
obscenidad pues estaba destinado a hacer desear , en su obra insultaba
con desprecio a los comerciantes llamándoles trafican-tes de deseos.
Luego los deseos son “educables “.
3- SISTEMA DE CREENCIAS : para Marina este
ingrediente es cla-ramente fruto de la educación, refiriéndose
a aquellas operaciones afectivas que hace-mos contínuamente y de
las que no sabemos, pero que nos determinan. Para dar-nos un ejemplo de
que tales operaciones tienen lugar , nos comentó la sorpresa que
solemos llevarnos cuando, de pronto bajando unas escaleras nos encontramos
con un escalón de más y tropezamos. Se plantea “ si hubiéramos
hecho el calculo correcto de escalones, no nos hubiéramos dado cuenta
de que habíamos hecho un cálculo" . Continuó : Parece
de cajón enseñarle al niño, mo-delos afectivos que
le permitan soportar niveles de tensión progresivamente más
altos. Se sabe que la actitud de seguri-dad o inseguridad básica
se “ aprende “ sobre los 22 meses y está en relación con
la capacidad de separarse de la madre .
Mencionó aquí, la Terapia "Reaccional
Emotiva" en la que el au-tor, tras observaciones clínicas de pacientes
en que, tras un fracaso emocional en que claramente eran víctimas
y aún así, aparecían fuertes senti-mientos de culpa.
Dedujo que debería haber un sentimiento o creencia básico,
común a estas per-sonas “educado “, porque no todo el mundo reaccionaba
así, que determinaba su estado afectivo. Al autor le pareció
que esta creencia bá-sica que determinaba estos cuadros era la de
: “ si das amor tendrás amor “, pensando entonces que si somos capaces
de cambiar estas creencias , seremos capaces de cambiar la pato-logía
que determinan .
4 -IDEA DE NOSOTROS MISMOS. No se extendió
en este apartado.
Para terminar la conferencia hizo una clara propuesta
, una llamada a la socie-dad a hacer ruido, a fin de propugnar y
promover una PEDAGOGÍA AFEC-TIVA que obligatoriamente tendría
estas etapas : Primero , en manos de padres y maestros de primaria . Más
tarde una educación de la motivación y la volun-tad ( 4 años
) . Y por último una educación ética .
La mayoría de las ideas expuestas en esta
conferencia están conteni-das en los primeros capítulos de
su última obra “El laberinto sentimental”.
La conferencia intercaló momentos de brillantez , con
otros en que las ideas parecían poco hilvanadas. Sin duda , la antropología
afectiva, la parte más apasionante que, con sus ejemplos , nos enseña
cómo efectivamente, es posible culturalmente educar diferentes estilos
afectivos. Habló reposado, haciendo gala de un afán pedagógico
propio de un catedrático de instituto, parecía dictar
clases descubriendo a sus alumnos ideas apasionantes , pero sin apasionarse
al exponerlas.
Esta pedagogía afectiva que propugna Marina será
para las genera-ciones futuras. Sin embargo ,me pregunto: si de verdad
es posible educar es-quemas sentimentales distintos desde el mismo marco
cultural. ¿No tendríamos que “ ser diferentes” , para educar
de forma diferente?. ¿Es posible educar para erradicar determinados
sentimientos , como la envidia?. ¿Pueden quererse dos
hijos de la misma manera y sobre todo, es conveniente ?
FRANCISCO MORENO TOVAR PSIQUIATRA ADJUNTO HOSPITAL PROVINCIAL OURENSE.
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